Este 22 de septiembre, en nuestra parroquia mercedaria de Lleida, hemos celebrado con mucha alegría nuestra patronal, la fiesta de Nuestra Señora de la Merced.
Desde las 11:30h. las calles del barrio La Mariola empezaron a llenarse de fervor y fe, que se postergó durante la procesión y posteriormente con la celebración solemne en el templo parroquial.
Y esta fiesta no habría sido posible sin la presencia de los feligreses y de los grupos parroquiales que han estado firmes para que esta celebración. Quédate leyendo este post que te contaremos cómo ha transcurrido esta fiesta.
Así ha sido la celebración de Nuestra Señora de la Merced
Acompañados por el sonido solemne de los integrantes de la Asociación de Bombos y Tambores de la parroquia, y de la Cofradía de la Merced, los sacerdotes y los fieles hemos recorrido las calles de la zona.
Tomamos el carrer La Mercè, siguiendo por Pío XII, después por Plaza Barcelona y la Avenida Rusiñol.
En todo momento la procesión ha sido una expresión viva de nuestra fe católica, que resonó en cada paso con el ritmo de los tambores y el silencio respetuoso de los fieles.
Al llegar al templo, la imagen de la Nuestra Señora de la Merced fue entronizada con solemnidad. Ha sido gracias a cuatro jóvenes, apoyados por otros costaleros, quienes portaron con orgullo y devoción la imagen de nuestra Madre.
La eucaristía en honor a nuestra Madre de la Merced
Antes de la Santa Misa, los fieles se unieron en un acto de oración comunitaria rezando el Santo Rosario. Con una iglesia colmada de almas devotas, se vivió un momento de oración sincera, donde cada cuenta del rosario fue ofrecida con amor y confianza en la intercesión de Nuestra Señora de la Merced.
La Eucaristía, celebrada por tres religiosos, fue el culmen de la jornada. El templo mercedario de Lleida se transformó en un lugar de encuentro profundo con Dios. Los cánticos, las oraciones y las ofrendas elevaron nuestros corazones, llenándonos de esperanza y agradecimiento por las gracias recibidas.
Gracias a todos
Queremos expresar nuestro más sincero agradecimiento a todos los feligreses que participaron con tanta fe y alegría.
Gracias también a la Guardia Urbana por su excelente servicio, asegurando que la procesión se realizara con total normalidad y sin contratiempos.
Nuestra Señora de la Merced, sigue guiándonos y protegiéndonos bajo tu manto. ¡Que sigamos viviendo con devoción y alegría tu ejemplo de entrega y amor!