Ruth tiene claro que el apostolado que presta a la Iglesia a través de la música no es por iniciativa propia, sino obra de la Virgen María.
Es curioso y admirable escuchar a una niña de 11 años hablar de Dios y de cómo la Santísima Virgen María le indica el camino a seguir cada día.
Sin duda alguna sus padres, Goretti y Josep, han hecho una hermosa labor cristiana en la formación de su fe.
Pero ¿quién es Ruth y cómo fue que en este verano de 2024 se convirtió en la voz que acompañó algunas de las misas de nuestra parroquia Mare de Déu de la Mercè?
Vamos a conocer un poco su historia. Sigue leyendo.
Ruth y sus inicios en la música
Desde muy pequeña Ruth le pidió a sus padres que le compraran una guitarra y aunque le concedieron su deseo, durante un buen tiempo el instrumento estuvo allí, formando parte de la decoración de su habitación.
Siempre ha estado inmersa en el desarrollo de sus habilidades musicales. Ruth ha tocado el oboe, actualmente toca el violonchelo y desde que tiene 5 años cursa estudios en el Conservatorio y Escuela Municipal de Música de Lleida.
Pero fue hasta hace un poco más de tres meses cuando se animó a tocar la guitarra, a aprender y a practicar con más insistencia.
“Realmente, si lo pienso, todo empezó con el deseo que Dios puso en mi corazón. Sabía que en tres meses aprender a tocar muy bien la guitarra era imposible para agradar a Dios, pero me animé a hacerlo en verano”, dijo Ruth, quien estudia en el colegio María Salvatoris.
Coro durante el verano para la parroquia
Ante una necesidad, surge una solución. Ruth sintió la inquietud de hablar con los padres Dinis y Vicente (sacerdotes de nuestra parroquia) para expresarles su preocupación porque en la misa del domingo no hubiese quién cantara, esto a raíz del merecido descanso que se toman en verano los integrantes del coro Agua Viva Mercedaria.
“Quise expresar mi tristeza al sentir que el Señor se iba a sentir solo en las misas. Hablé con ellos y les dije que Dios no está de vacaciones y de ahí surgió el nombre del grupo ‘Dios no está de vacaciones’. El padre Vicente me dijo que si me comprometía y la Virgen me daba la gracia ¡que adelante! Y eso hice, eso sí, todo con la ayuda de mi madre que para mí tiene la más bonita voz que he escuchado en mi vida”, explicó.
Ruth dice que tiene suerte porque sus padres, su abuela y algunas de las religiosas del colegio María Salvatoris la han educado en la fe y esa es la fe que le ha dado la luz para iniciar con este pequeño apostolado de verano.
“Esperemos que todos los veranos pueda seguir sacando adelante ‘Dios no está de vacaciones’ para que Jesús nunca esté solito. Es que si lo piensas, Jesús nunca está de vacaciones, siempre está trabajando por nosotros”, ha expresado.
Agradece también a las personas que se han unido a tocar o a cantar en las Horas Santas o en las misas durante el tiempo estival. También al padre Vicente por dejarle sacar adelante lo que Dios puso en su corazón.
“Cuando nos abandonamos en Dios, la Virgen nos empuja a hacer la voluntad de Dios. Él siempre nos mira y escucha, y nosotros no deberíamos parar de escucharle. Sólo hemos de aprender a oírle”.
Así prepara sus canciones para las misas y adoraciones
Aunque el apostolado de Ruth es durante el verano, ha respondido de forma positiva a la petición el padre Vicente para este año que ha comenzado estos días: acompañar la misa de los domingos de las 20:00h. con su guitarra y su voz ¡y así lo hace!
Para lograrlo se prepara. Si durante la semana escucha alguna canción que le agrada, la apunta y el fin de semana, junto a su madre, miran las canciones que la pequeña ha elegido (se la aprende si es nueva), toca la guitarra y las dos cantan hasta dejarla lista.
¿Cómo elige las canciones? No es fácil porque en su casa escuchan con mucha frecuencia canciones católicas y además sigue la pista de otros que admira, en Internet. Por ejemplo, le gustan las canciones de alabanza, algunas de Hakuna, de las religiosas de la Madre Félix (de su colegio), sigue al padre Javier Mora ‘Curry’, “así que no tiene una agrupación o cantante en concreto”.
¿Qué dicen los padres de Ruth?
Como no podría ser de otra forma, Goretti y Josep se sienten orgullosos de ver cómo su hija afianza a diario su relación con Dios y de cómo su compromiso con Él y la Virgen María es cada vez mayor.
“Para nosotros que una niña con tan sólo 11 años decida dejar de asistir a paseos y excursiones en verano para acompañar a Jesús, es una gozada. Es lo mejor que podemos aspirar como padres. Somos muy afortunados de tener a nuestra hija Ruth que nos recuerda que nuestro sueño, que era tener una niña educada en la fe, lo ha hecho la Virgen, ella solita”, expresó su madre, quien siempre le lleva de la mano en las eucaristías y durante el canto.
Goretti, fiel colaboradora de la parroquia mercedaria de Lleida, sueña con que en las casas de los cristianos católicos se viva la fe y se replique en niños y adolescentes. Y recordó que hacer oración en familia es importante desde siempre, porque es una buena forma de dejar entrar a Dios en nuestro corazón y nuestras vidas.
¡Qué bonito el testimonio de Ruth y de cómo a través de su apostolado puede llamar a muchos otros de su edad a hacer lo mismo!
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